En esta sección presentamos un recorrido por publicaciones online de otros países para ver cómo trabajan y cómo se están desarrollando, para entender mejor el medio. Hoy reseñamos la revista literaria Taller Ígitur.
Los cambios que operaron en cómo hoy leemos y producimos textos, están intrínsecamente asociados con lo que consideramos actualmente como literatura. Y ahí es donde entran en juego las revistas literarias online que, desde hace varios años, han ido ganando terreno para reemplazar a la edición en papel. Ese cambio de soporte funcionó, en muchos casos, como continuación de una tradición de la literatura hispanoamericana, de revistas que intentaron ir más allá del gusto literario estereotipado, buscando una sociedad más abierta a nuevas formas narrativas y más crítica. Sin embargo, ¿podemos considerar que exista en el siglo XXI un grupo considerable de revistas online que hayan generado un cambio sustancial en las letras como lo fue la invención de la imprenta para la comercialización de las novelas?. Aún no puede observarse un giro semejante, pero sí la potencialidad del formato digital posibilita la reunión de diversos géneros y escritores de variadas latitudes, conviviendo en un mismo espacio, y al alcance de todos.
Tal es el caso de la Revista Literaria Taller Ígitur, dirigida por Fernando Salazar Torres, poeta, crítico literario, ensayista y gestor cultural mexicano. Toma su nombre del poema Ígitur o la locura de Elbehnon del escritor simbolista Stéphane Mallarmé, escrito alrededor de 1867. De acuerdo con las palabras de su director, “pensado como una obra de iniciación, Ígitur representa la Nada que se torna hacia el Todo. Su significado, por tanto, es lo que quiere ser este grupo de escritores mexicanos: partiendo de la nada, de la nulidad, el comienzo exige un tránsito, el recorrido que tiene como clave última el proceso creativo, la voz poética personal. Todos quienes integran el taller están en esta breve muestra, todos con planteamientos poéticos distintos, todos heterogéneos”.
El espíritu de ese manifiesto puede verse claramente plasmado en la web de la publicación, donde tienen lugar diversidad de autores y temáticas. En el sitio encontramos las secciones de poesía, biblioteca, entrevistas, narrativa y ensayo. Los escritos son muy ricos y variados, hay desde poesía nórdica, africana, latinoamericana y europea de variadas épocas, hasta reseñas de libros y publicaciones, y conversatorios con figuras centrales de la literatura y el pensamiento contemporáneo como Jean-Luc Nancy o Chloe Aridjis, última ganadora del premio PEN/ Faulkner de Ficción.
En su nombre se cuela una palabra que tiene un lugar especial en la producción literaria de América Latina: taller. Los talleres literarios fueron refugio en momentos históricos convulsionados y, en muchos casos, continuación de revistas que iban desapareciendo. Ante la necesidad de discutir críticamente los textos, y las dificultades de reunirse en cantidad en espacios públicos por las condiciones que impartían los gobiernos dictatoriales, a través de todo el continente se armaron reuniones en lugares privados (casi siempre la casa del tallerista) para lograr ese intercambio y aprendizaje. En el caso de Ígitur vemos que ambas configuraciones conviven. Incluso en la web se anuncia la apertura del último taller: Las categorías negativas de la poesía moderna, dictado también por quien dirige la revista.
Las traducciones tienen un lugar importante dentro del sitio, cosa que cualquier lector hispanohablante interesado agradece. Así podemos acceder a un libro de aforismos de un autor de El Cairo, a las poesías de un autor de Palermo, Italia, de una poeta turca, o de un escritor latino nacido en la primera década d.C.
El formato folletín aparece recientemente en la Revista. Comenzaron con tres entregas de la novela policíaca, todavía inédita, Turín no es Buenos Aires, de Giorgio Ballario, en traducción, por primera vez al español, de Fernando Salazar Torres.
En cuanto a composición visual, las notas no tienen un mismo criterio estético, sino que van acompañadas de las imágenes de fotos de portadas de libros o de los autores involucrados, según el caso. Pero sí todas tienen al final la referencia biográfica del autor. Además, han incorporado su propio canal de Youtube como apéndice de lecturas de poesía en la voz de sus autores, con videos que van de los dos hasta los cinco minutos, acordes a la capacidad de atención del público actual. Así, un lector interesado, puede llegar al canal a través de la web, o conocer la revista primero a través de los videos de difusión de su contenido.
Referencias
http://www.donacianobueno.com/directorio-literatura/48229/taller-igitur/
Muchísimas gracias. Un fuerte abrazo de todo Taller Igitur desde México hasta Argentina.